Nahir Galarza, quien está siendo juzgada por el crimen de su ex novio, Fernando Pastorizzo, ocurrido en diciembre en Entre Ríos, amenazó con quitarse la vida si es que se difunde un video íntimo que la tiene como protagonista junto al joven asesinado.
"Si se llega a viralizar el video, ustedes serán los culpables de que me suicide", le habría dicho la acusada al fiscal Sergio Rondoni Caffa. Nahir amenazó luego de que un perito informático que accedió al celular de Pastorizzo contara que había un video íntimo de la pareja, aunque no aclaró de qué se trataba.
“¿Es necesario que muestre ese video? ¿Por qué lo quiere mostrar? Si usted muestra ese video va a ser el responsable de que yo me suicide”, le dijo Galarza al fiscal.
Ante eso, según el diario Clarín, el abogado de la querella Juan Carlos Peragallo pidió que se mostrara ese video, con la idea de que se demostrara el vínculo entre los jóvenes. Sin embargo, los jueces no aceptaron el pedido y dijeron que en todo caso lo mirarían en la intimidad.
Tras lo ocurrido, el abogado de la estudiante entrerriana puso en dudo la presencia de su defendida en el proceso. El letrado explicó que “Nahir está quebrada” por la situación y que es muy probable que ya no se presente más a las audiencias.
Una amiga de Nahir Galarza confesó que la joven tenía relaciones con otros amigos
Durante la última jornada declaró Joaquín Osorio Cadot (19), quien contó que conoció a Pastorizzo y también a la acusada, con quien mantuvo relaciones sexuales desde 2016 hasta aproximadamente un mes antes del crimen.
Este testigo afirmó que la madrugada del asesinato, cerca de las 5.40, él vio a Galarza entrar a su casa con "una sonrisa extraña, media burlona" y que llevaba algo en la mano que no pudo precisar con exactitud, explicó a Télam la fuente consultada.
A su turno, el testigo Rafael de Stefano (19) declaró que él tuvo sexo con Galarza un sola vez y que en Navidad la notó "extraña" pero que ella no le quiso decir qué le pasaba, y que esa fue la última vez que la vio.
En la madrugada del 29 de diciembre último en Gualeguaychú, Pastorizzo fue hallado malherido en la calle con un tiro en la espalda y otro en el pecho, y su moto y dos cascos tirados a su lado. El muchacho murió poco después, mientras que Galarza declaró inicialmente como testigo que había visto a su ex novio la noche anterior al crimen, aunque ante la sumatoria de indicios en su contra quedó detenida. Desde entonces, la defensa solicitó la excarcelación y, subsidiariamente, el arresto domiciliario, pero la Justicia rechazó todos sus requerimientos.
El juicio comenzó hace una semana, cuando Galarza se negó a declarar y le gritó "¡qué mentirosa!" a la madre de la víctima luego de que ésta afirmó en su testimonial que la imputada "gritaba y golpeaba" a su hijo. En otra de las audiencias, Sol Martínez, una amiga de la acusada, declaró que la víctima no era un joven "violento" y que sólo en una ocasión se enteró que había golpeado a la imputada.